Luego que desde el gobierno nos quieran imponer una ley que afectaba directamente a la creación, a nuestra obra y por ende a nuestra profesión, hicimos todo el ruido que pudimos, insistimos y hasta se escribió especialmente al ministro en, al menos, un periódico de gran tirada (gracias Pablo) y se le hizo ver que no se pactó con lxs autorxs sino con unos representantes que no representaban la posición de la mayoría, entonces ahí se consiguió frenar un proyecto-nada-inteligente para el bien común, en busca de un consenso más real que artificial.
Si bien la retirada del proyecto de Real Decreto del Ministerio de Cultura supone un avance sí verdaderamente se retoma el diálogo (ya que se trata de una amenaza directa a las y los creadores del cómic, de la ilustración, de la fotografía y de cualquier profesión creativa a las que se condena a la precarización) ahora vamos por una regulación adecuada y ética.
Somos las y los autores quienes constituimos las dinámicas productivas del cómic, aportando ideas, originalidad y talento, pero además quienes soportamos el mayor peso del esfuerzo (y el eslabón más precario). La base de cualquier industria editorial.
Las IAs generativas únicamente se alimentan de todo lo que hemos ido volcando en redes durante años, ese es su jardín del edén, los árboles de la gratuidad del que se recoge todo el producto para alimentar a las iAs, sin ese fruto divino, sin ese alimento, los motores de la iAs no funcionan.
Por todo esto, las y los autores decimos STOP ✊
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